Grafito expandido. Resistente a productos químicos, es un material que se autolubrica y trabaja excelente a altas temperaturas, velocidades periféricas y presiones.
Asbesto grafitado. Cada una de las hebras de asbesto es reforzada con grafito, así como la trenza en general para una máxima lubricación.
Fibras de PTFE grafitadas. Agregar grafito reduce la fricción, disipa el calor y aumentan la resistencia a velocidades periféricas altas.
Las empaquetaduras de grafito se fabrican a partir de cordón grafitado, mismo que se elabora con una gran cantidad de filamentos de grafito que se retuercen para combinarlos, resultando un hilo que posteriormente se trenza para aumentar su resistencia a la tracción y durabilidad.
Los tipos de empaquetaduras que se utilizan más frecuentemente son las trenzadas de fibras minerales y sintéticas, siendo los materiales más frecuentes las fibras de asbesto, de PTFE, de grafito expandido, fibras de carbón, aramidas, etc. Sin embargo, la empaquetadura de grafito destaca debido a sus características y las ventajas que ofrece.
Temperatura máxima de 650ºC
Presión máxima 450 Bar
Mayor velocidad de giro 30m/s
Mayor diferencia en el rango del PH 0-14
